26.10.06

El código genético revela los secretos de la abeja de la miel

reuters.es 26/10/2006
LONDRES (Reuters) - Los científicos han desenmarañado el código genético de la abeja de la miel, descubriendo pistas sobre su complejo comportamiento social, su intenso sentido del olfato y sus orígenes africanos.
Es el tercer insecto cuyo genoma ha sido detallado y se une a la mosca de la fruta y al mosquito en este exclusivo club.
La abeja de la miel, o 'apis mellifera', ha evolucionado de forma más lenta que otros insectos pero tiene más genes vinculados al olfato.
"En biología y biomedicina, las abejas de la miel se usan para estudiar áreas muy diversas, incluyendo enfermedades alérgicas, desarrollo, gerontología, neurociencia, comportamiento social y toxicología venenosa", dijo Gene Robinson, director del Centro de Investigación de las Abejas de la Universidad de Illionis y uno de los líderes del proyecto.
"El proyecto del genoma de la abeja está abriendo la era de la investigación de la abeja para el beneficio de la agricultura, la investigación biológica y la salud humana", añadió.
Con su estructura social muy evolucionada con decenas de miles de obreras comandadas por la reina, el mapa del genoma de la abeja también podría mejorar la investigación de genes vinculados al comportamiento social.
Pero el consorcio de científicos, que informó de los hallazgos en la revista Nature, dijo que es preciso un análisis integral de la abeja y otras especies para comprender su vida social.
La reina tiene una esperanza de vida diez veces mayor que las obreras y pone 2.000 huevos al día. Pese a tener un cerebro diminuto, las abejas tienen habilidades cognitivas y aprenden a asociar el color de una flor, su forma y olor con la comida, lo que incrementa su habilidad para buscar alimentos.
Los científicos que analizaron el código genético han descubierto que la abeja de la miel se originó en África y se extendió por Europa en dos antiguas migraciones.
"La expansión de las abejas africanas por todo el Nuevo Mundo es un ejemplo espectacular de invasión biológica", escribieron los científicos en Nature.
El número de genes de las abejas vinculados al olor supera a los vinculados al gusto. Estos insectos también tienen menos genes que la mosca de la fruta o el mosquito para la inmunidad.
Las abejas usan feromonas, sustancias segregadas por las glándulas, para distinguir el género, casta y edad de otras abejas, según los científicos.
"Esta secuencia de ADN es un gran paso hacia responder una cuestión básica de la evolución social: a nivel genómico, qué hace falta para diseñar un insecto colonial avanzado", dijo Edward Wilson, de la Universidad de Harvard en un comentario sobre la investigación.